Un conmovedor retrato de la posguerra en España
Hace unos días tuve la oportunidad de ver una de las películas que ha triunfado en los premios Óscar de este año, The Artist. Si bien fueron casi dos horas en las que me mantuve enganchado a la historia de esos dos actores que se enfrentan al paso del cine mudo al sonoro, en algún momento no pude evitar mirar a mi alrededor y sonreír con un punto de sorpresa. ¡Un sábado por la noche, más de doscientas personas viendo una película muda! ¡Qué extraño!
Hay quien piensa que la apelación a la nostalgia de The Artist es la clave de su éxito. Estoy de acuerdo. Sin embargo, pienso que hay otro elemento que explica este fenómeno. Vivimos rodeados de infinidad de expresiones artísticas que reclaman nuestra atención: literatura, cine, música, artes clásicos y contemporáneos. Además, la información sobre cualquier tema es inabarcable: reportajes periodísticos, libros de actualidad o de historia, televisión, internet... En la sociedad de la información, pienso, conseguir encontrar fórmulas originales y diferentes para contar lo que tantos otros ya han contado, es una verdadera aventura. The Artist consigue conmover al público con esa historia nostálgica y silenciosa. Y Antonio Calderón Reina lo consigue también con su libro 511 cápsulas contra el olvido.
Como sucede con la película, 511 cápsulas contra el olvido apela a la nostalgia. Pero sobre todo, su capacidad para conmovernos tiene que ver con la forma original de plantearnos una mirada a los años de la postguerra en España. Hemos leído extraordinarios trabajos de historiadores que han descrito con minuciosidad todo lo que sucedió, hemos disfrutado del esfuerzo de novelistas por encarnar en algunos personajes aquellos sucesos. Hemos visto muchas cosas. Hemos escuchado muchas más. Pero yo al menos no me había encontrado con una palabra tan pura, tan poética, que me hiciera sentir con tanta intensidad como se vivía en aquella época no tan lejana.
Si en The Artist tenemos que superar el prejuicio de enfrentarnos a una película muda para acceder a la emoción que contiene, en 511 cápsulas contra el olvido tenemos que superar la falta de costumbre que probablemente todos tenemos al encontrarnos con un libro de aforismos. Puedo asegurar que cuando cierren el libro, aunque no habrán aprendido nada nuevo, se habrán conmovido profundamente con las imágenes y la sonoridad de los aforismos de Antonio Calderón.
Estoy deseando conocer a Antonio Calderón cuando venga a presentar su libro a Muga. Estoy seguro de que mientras le esté escuchando, no podré evitar ver al hombre que narra en primera persona, al hombre que vivió en primera persona lo que ahora son unos recuerdos, que ha decidido compartir con nosotros con forma de aforismo. Aforismos como estos:
Me acuerdo de que aquel mundo estaba cogido con alfileres que podían atravesarnos.
Me acuerdo de que en el árbol de aquella justicia siempre había un ahorcado
Me acuerdo de que cuando alguien del barrio conseguía llegar lejos... no volvía.
Me acuerdo de que por el mar corrían las liebres, por el monte las sardinas y por las cocinas los garbanzos.
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Próximas actividades en Librería Muga
· Jueves 15 de marzo, a las 19h., encuentro con Isaac Rosa para comentar con él su última novela
La mano invisible
· Lunes 26 de marzo, a las 19h., presentación de los libros de la editorial Kaleida, especializada en temas de pedagogía.
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